Situada en el corazón de la Baja Sajonia alemana, Osnabrück es una ciudad cargada de historia y patrimonio cultural. Entre sus muchas atracciones históricas se encuentra el Hexengang, una intrigante reliquia del pasado que ha cautivado a los visitantes durante generaciones.
¿Qué es el Hexengang?
El Hexengang (Paseo de las Brujas) hace referencia a una red de túneles subterráneos situados bajo Osnabrück. Estos complejos pasadizos se remontan a la época medieval y fueron diseñados originalmente como vías de escape durante los periodos de asedio o ataque a la ciudad. Con el tiempo, también han servido para otros fines, como almacenes y escondites durante la Segunda Guerra Mundial.
Breve historia
Los orígenes exactos de estos laberínticos pasadizos están rodeados de misterio, pero se cree que se construyeron en algún momento entre los siglos XIII y XV, cuando Osnabrück era objetivo frecuente de los invasores debido a su situación estratégica en el cruce de rutas comerciales clave. Los túneles permitían a los habitantes moverse sin ser vistos e incluso escapar si era necesario, al tiempo que mantenían sus preciadas pertenencias a salvo de los saqueadores.
La conexión con los juicios de brujas
Además de sus usos prácticos, estos túneles encierran un oscuro significado histórico asociado a los juicios por brujería celebrados en Osnabrück durante el siglo XVII. Se dice que las brujas acusadas utilizaban estos pasillos subterráneos para reuniones clandestinas o incluso como caminos secretos hacia los lugares donde se celebraban los juicios, donde eran perseguidas bajo sospecha de practicar la brujería.
Recorrido por los túneles en la actualidad
Hoy en día, los turistas pueden explorar secciones de Hexengang a través de visitas guiadas que ofrecen una visión fascinante de este sombrío capítulo del pasado de la ciudad. Los visitantes experimentarán de primera mano cómo la gente vivía bajo una amenaza constante y, sin embargo, encontró formas ingeniosas como la construcción de redes de túneles ocultos para sobrevivir contra viento y marea.
Museo am Schölerberg
Para los interesados en saber más sobre los juicios de brujas, es muy recomendable visitar el Museum am Schölerberg. El museo alberga una exposición dedicada a este sombrío periodo de la historia de Osnabrück, donde los visitantes pueden aprender sobre el papel de la ciudad durante estos infames juicios, incluyendo relatos detallados de algunos casos y sus resultados.
La experiencia Hexengang
Un recorrido por Hexengang ofrece un viaje inolvidable a través del tiempo. Mientras navega por estrechos pasadizos envueltos en la oscuridad, guiado únicamente por la luz parpadeante de las antorchas, se sentirá transportado a la época medieval, cuando la vida estaba plagada de peligros e incertidumbre. Por el camino, guías experimentados compartirán cautivadoras historias que dan vida a los acontecimientos históricos asociados a estos túneles, haciendo que su exploración sea aún más enriquecedora.
Visitar Hexengang: Información práctica
Las visitas están disponibles durante todo el año, pero es mejor reservar con antelación, ya que suelen llenarse rápidamente debido a la gran demanda. También es aconsejable llevar calzado cómodo, ya que algunos tramos implican subir escaleras empinadas o caminar por superficies irregulares. Por último, recuerde que las temperaturas en el interior de los túneles siguen siendo frescas incluso en verano, por lo que puede ser útil llevar una chaqueta ligera.
En conclusión…
Osnabrück está llena de tesoros históricos por descubrir y Hexengang destaca entre ellos no sólo por sus características arquitectónicas únicas, sino también por su intrigante pasado entretejido con historias de valentía, supervivencia y persecución en la época de los juicios de brujas, lo que lo convierte en un destino de visita obligada para cualquiera que visite esta encantadora ciudad alemana.
Preguntas más frecuentes
¿Qué es el Hexengang de Osnabrück y cuál es su importancia histórica?
El Hexengang, o «Camino de las Brujas», en Osnabrück, Alemania, es un lugar de importancia histórica que data del siglo XVII. Su nombre se debe a un suceso ocurrido durante los juicios por brujería de 1635, cuando presuntas brujas fueron conducidas por esta ruta desde la prisión de la ciudad hasta la horca para ser ejecutadas. Hoy es un conmovedor recordatorio de este oscuro periodo de la historia.
¿Dónde se encuentra exactamente el Hexengang en Osnabrück?
El Hexengang se encuentra cerca del Stadthalle Osnabruck y del monumento Heger Tor, en el centro de la ciudad. Comienza en la Lotter Straße y se extiende hasta la calle Heger-Tor-Wall. Este sendero histórico ofrece a los visitantes una visión única de un aspecto del pasado de Osnabrück mientras exploran otras atracciones cercanas.
¿Se celebran eventos o ceremonias especiales en Hexengang?
Aunque no hay eventos o ceremonias regulares dedicados específicamente al Hexengang, a menudo forma parte de visitas guiadas locales que profundizan en diversos aspectos de la historia de Osnabrück, incluyendo su época medieval y periodos más turbulentos como la caza de brujas. Estas visitas ofrecen una visión fascinante de estos acontecimientos históricos junto con relatos sobre quienes caminaron por este sendero hace siglos.
¿Puedo visitar Hexengang en cualquier momento? ¿Hay que pagar entrada?
Dado que el Hexengang es un sendero público que atraviesa partes del centro de Osnabrück, puede visitarse en cualquier momento sin restricciones ni tarifas de entrada. Sin embargo, si desea conocer más a fondo su contexto histórico y su significado, unirse a una de las muchas visitas guiadas temáticas que ofrecen las oficinas de turismo locales puede conllevar un pequeño coste, dependiendo del paquete turístico que elija.
¿Qué otras atracciones puedo visitar cerca de Hexengang en Osnabrück?
Osnabrück es una ciudad rica en historia y cultura. Cerca del Hexengang, encontrará el monumento Heger Tor, que conmemora a los soldados de Osnabrück que murieron durante las Guerras Napoleónicas. También cerca está la Felix-Nussbaum-Haus, un museo dedicado al artista judío Felix Nussbaum, que nació en Osnabrück y pereció en Auschwitz. El casco histórico, con sus encantadoras casas de entramado de madera, la catedral de San Pedro y varios museos, también están a poca distancia a pie.